miércoles, 28 de diciembre de 2016

BETELGEUSE, LA GIGANTE ROJA DE LA CONSTELACIÓN DE ORION, GIRA MÁS RÁPIDO QUE LO ESPERADO

Imagen del año 2012 en el infrarrojo, de la famosa estrella gigante roja Betelgeuse, que está girando mucho más rápido de lo esperado. Crédito: L. Decin / University of Leuven / ESA
  
En la Revista Monthly  Notices of The Royal Astronomical Society del 19 de diciembre de 2016, se publica la investigación liderada por el Astrónomo J. Craig Wheeler de la Universidad de Texas en Austin de un grupo internacional de estudiantes universitarios, considera que la Estrella Gigante Roja Betelgeuse de la Constelación de Orión, puede haber tenido un pasado mucho más interesante de lo que aparece.
Wheeler ha encontrado la evidencia de que la estrella Súpergigante Roja puede haber nacido con una compañera que más tarde absorbió.

Para ser una estrella tan conocida, Betelgeuse es una estrella masiva  súpergigante roja bastante misteriosa, que está llegando al final de su vida por cuanto se ha  hinchado hasta muchas veces su  tamaño original. Algún día va a explotar como una supernova, lamentablemente nadie sabe cuándo.
Wheeler, experto en supernovas, ha dicho: “Podría ser dentro de  diez mil años a partir de ahora o podría ser mañana por la noche”.

Una nueva pista del futuro de Betelgeuse, implica su rotación. Cuando una estrella se infla para convertirse en una súpergigante, su rotación debe reducir su velocidad; “Es como el clásico  patinador en el hielo cuando abre sus brazos hacia arriba” ha dicho Wheeler. A medida que el patinador abre sus brazos,  se ralentiza, así debe haber sucedido con la rotación de Betelgeuse, que  disminuyo cuando la estrella se expandió. Pero no es lo que el equipo de Wheeler ha encontrado.  

Wheeler dice: “No podemos dar cuenta de la rotación de Betelgeuse, por cuanto está girando 150 veces más rápida que cualquier estrella que simplemente está girando al hacer su vida”.
Él dirigió un equipo de estudiantes que incluye a Serafina Nance, Manuel Díaz y James Sullivan de la Universidad de Texas, además de  estudiantes visitantes procedentes de China y Grecia, con los que estudiaron a la estrella Betelgeuse mediante un programa modelado denominado MESA; que los estudiantes utilizaron para lograr medir por primera vez la rotación de la estrella.
Wheeler al contemplar la rotación extrañamente rápida de Betelgeuse, dijo que empezó a especular: “Supongamos que Betelgeuse tenía una compañera que nació  primero; y que vamos a suponer que ésta orbitaba alrededor de Betelgeuse en una órbita aproximadamente del tamaño de Betelgeuse y que la absorbió cuando se convirtió en una súpergigante roja”.
Él ha explicado que la estrella compañera, una vez ingerida,  transfirió el momento angular de su órbita en torno a Betelgeuse sobre el exterior de la estrella, lo cual aceleró la rotación de Betelgeuse.

Wheeler ha estimado que la estrella compañera habría tenido aproximadamente la misma masa que nuestro Sol, permitiendo lograr así la velocidad actual de rotación de Betelgeuse, de unos 15 km/seg.
Por lo tanto, “Hay alguna evidencia de esta teoría que considera haberse tragado a una compañera”, tal vez. Y Wheeler agrega: “Si Betelgeuse tragó una estrella compañera, lo más probable es que la interacción entre las dos estrellas, haría que la súpergigante  disparara algo de materia hacia el espacio”.
Al saberlo, importa la rapidez con que se desprende de una estrella gigante roja, alrededor de unos 10 km/s;  lo que le ha permitido a Wheeler  estimar aproximadamente  a que distancia de Betelgeuse este asunto debería estar en la actualidad; y agrega, “En mi ingenuidad me fui a la literatura y lei sobre Betelgeuse, y resulta que hay una cáscara de la materia que se sienta sólo un poco más cerca de Betelgeuse de lo que se había estimado”.

Orión  McDonald Observatory - imagen del 20.nov. 2016 - Crédito: Tom Montemayor

Las imágenes infrarrojas tomadas de Betelgeuse en el año 2012 por Leen Decin de la Universidad de Lovaina en Bélgica mediante el Telescopio Herschel en órbita, muestran dos conchas  que interactúan en un lado de Betelgeuse.
Son varias las interpretaciones que existen; algunos dicen que este asunto es un arco de choque creado como atmósfera de Betelgeuse, que empuja a través del medio interestelar ya que la carrera es a través de la Galaxia.
Wheeler ha dicho: “En realidad, nadie conoce con certeza el origen, pero sin embargo, “el hecho es”; no hay evidencia de que Betelgeuse tenía algún tipo de conmoción en más o menos en esta escala de tiempo; es decir, hace unos 100.000 años, cuando la estrella se expandió a una súpergigante roja”.

La teoría de  la ingestión de un compañero cercano, podría explicar tanto la rápida rotación de Betelgeuse y de esta materia cercana.

Wheeler y su equipo de estudiantes, prosiguen sus investigaciones sobre esta enigmática estrella. Se dice qu esperan sondear a Betelgeuse utilizando una técnica llamada “Asterosismología” que permitirá buscar ondas sonoras que afecten a la superficie de la estrella, lo que les permitirá obtener pistas sobre lo que está sucediendo en el interior de su oscurecido capullo. También utilizarán el código MESA para comprender mejor lo que sucedería si Betelgeuse se comió una estrella compañera.
Fuente: McDonald Observatory – 19.dic.2016

Traducción libre de SOCA